El constante cambio de los consumidores requiere nuevas capacidades que antes no existian, Lograr gestionar de manera eficiente la experiencia del cliente durante toda su relación con su empresa/producto/servicio es fundamental para asegurarse de cumplir sus expectativas. Estos nuevos desafios requieren de tecnología de punta, y procesos internos muy afinados para lograr anticipar los cambios que siempre lo mantendrán con ventaja competitiva.